Fue tan difícil como esquivar una bala de agua. El cielo se cubrió de blanco, la noche se tornó día y perdió su sentido.
Háblame del amor, del rumor que corroe tus pasillos y que no quiere salir. Te hablaré del amor a secas, es un amor deshidratado, despistado y sin corazón, sólo tiene vísceras rojas y negras, es un amor sin maquillaje, feo, puro y real. Es el amor que queda al día siguiente, cuando la ropa interior deja de ser producto de charcutería, cuando el cuello es tan sólo un tobogán pálido que traga saliva y las razones son una pegatina rasgada en la misma pared del bar, olvidada. No hay amor a primera vista pero tantas pistas que nos pierden, tus bragas, el semen, las sábanas a la puerta del iném y las ganas de que te vayas antes de haberme levantado.